martes, 8 de julio de 2008

PrEtTy ScarED

Hoy he tenido una pesadilla. Y ayer. Y antes de ayer. Y siempre duermo mal y me levanto y las cosas no mejoran demasiado. No era una pesadilla. Era un pequeño reflejo en un espejo donde veía más claramente todo lo que estaba pasando. Lo que pasa. Un aviso. La anunciación me ha visitado. Y me ha dicho a voz en grito:

"déjalo pasar"

Gracias por el aviso. Pero a pesar de ver la piedra 100 metros antes, me tropiezo con ella y se me parten todos los huesos. Una vez más. En ella volvía a caer en tí (una vez más y las que quedan). Por que habías vuelto y la magia también. Pero resulta que no era más que una patraña. Una puta mentira. Un capricho que se te pasaba al saber que estaba allí de nuevo. Sólo querias saber que seguía ahí. Confirmar mi asistencia, dar crédito a tus OjOs por mi insistencia, mi fé ciega en ni Dios-sabe-que. Arrastrado rastroso con las rodillas llenas de gravilla, de la que se mete por la herida y escuece que te cagas a la hora de desinfectar.

"Lo sentimos , caballero, pero le llegó al hueso. Y de ahí...ya sabe como son estas cosas, joder...No pudimos hacer nada...Le llegó al corazón. Vuelve a estar infectado...Habrá que operar de nuevo."

(Explicación estúpida de como arrastrarse por el suelo sin las debidas precauciones, puede acabar pudriendo el corazón.)

Por el suelo, por el suelo. Lamiendo las suelas de tus zapatos. Y al contemplar satisfecha a tu fiel perro, mirabas para otro lado y te reías de mí en mi cara de CA(Not). Y me decías:

No te equivoques, todo han sido imaginaciones tuyas.

Si.
Y una mierda.

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