lunes, 7 de abril de 2008

Mirada Nacarada

Y si a estas alturas no sabes de que va el asunto, será mejor que lo dejes. No es algo personal. Simplemente es inevitable; inherente al contexto en el que tratamos.
Pues bien. Era ligero. Al menos mas de lo que parecia a simple vista. Estaba nacarado en la culata, y perfectamente cromado en el resto de la pistola. No sabia de que marca o modelo se trataba. Y le importaba una mierda. No sabia mucho esas cosas. Bueno, no sabía mucho de nada. Excepto de la vida. De esa perra si que sabía. Joder, que si sabía!. Y de esa puta vestida de verde que es la esperanza. Había aprendido a no confiar en ninguna. Y total, para que? .Tampoco le había servido de mucho irse por su lado y dar la espalda a los hipódromos, los tugurios de mala muerte y todos esos amigos malparidos, y las perras que le robaron el corazon y se lo comieron delante suyo mientras aún bombeaba amor y deboción absolutos. Tampoco recordaba muy bien como habia llegado hasta ahí. No se paraba a pensar demasiado en la cosas. Lo justo para que no le doliera la cabeza, el alma, el corazon y los cojones. Hasta ese preciso momento. Se paró un momento a mirar alredeor. Las sabanas, la pintura saltada o rasgada, o simplemente carcomida y raida por los años. La biblia del cajón de la mesilla de noche a medio abrir( que coño hace una biblia en un sitio como este?) OSTIAS y el cabecero de la cama. OH! el Cabecero De La Cama. Era único e irrepetible. Una puta barra de metal oxidada por los bordes. Seguramente debido a esa jodida gotera que había en su techo y que había empezado siendo una jodida humedad y acabaría siendo un jodido agujero en su jodido techo que le enseñaría que más arriba tampoco había nada. Solo un vacío amorfo y negro. Y el prefería su agujero amorfo y negro y cálido y conocido y excluido, eliminado y olividado, lejos de todas sus miradas y arrogancias. Por lo tanto, para que iba a molestarse en subir?. Y tragar con la letra pequeña. Con todas esas claúsulas jodidamente enanas del contrato de Permanencia vitalicia en la rueda de la fortuna que es vuestra vida, amigos!. Y tener que trabajar en trabajos que ni siquiera sabías que ni existian, como el tio que quita chicle de la calzada o el que te afeita el culo antes de una operación de almorranas o el más duro de todos, un muerto en vida que se mueve perezoso de la seputura que es su casa a la sepultura que es su oficina- dos por dos- y - una - pantalla- de -ordenador-k -nos-dejará-ciego-sordo-mudos-de-por-vida.
Joder! Por donde iba?. Se había olvidado por completo. No estaba muy acostumbrado a darle vueltas a las cosas y luego volver al punto de inicio. Para el no era tan fácil. Y de quién coño sería esa pistola?. Tenía que empezar a buscar otro hostal. No es muy buena señal encontrarte un revolver en suelo de tu cuarto el primer día. Se lo puso debajo de la almohada, justo como había visto hacer en la películas a todos esos chicos malos-de-buen-corazón que tanto le gustaban, y por primera vez en meses , durmió.

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